Fumaria

Descripción

La fumaria, también conocida como "hierba de la ictericia", se menciona desde la antigüedad como remedio hepático, sobre todo por el famoso médico griego Galeno. Ha sobrevivido a los siglos y recibió este nombre el día 13 del mes de Ventosa (21 o 22 de febrero en el calendario gregoriano) en la época de la Revolución Francesa.

La fumaria es originaria de Europa y el norte de África. Sus partes aéreas floridas, utilizadas en fitoterapia, contienen alcaloides isoquinolínicos (fumarina, estilopina y fumaricina), pero también ácidos fenólicos, flavonoides (isoquercetinas), mucílagos y sales de potasio.

Esta planta herbácea de la familia de las Fumariaceae es conocida por sus propiedades digestivas. Favorece el flujo de la bilis (colagogo y colerético) en casos de indigestión, flatulencia, estreñimiento, digestión lenta o dolores espasmódicos.

La fumaria también tiene propiedades dermatológicas. Es antiinfeccioso y se utiliza tradicionalmente para trastornos de la piel, como eczemas, psoriasis y dermatitis. Esta planta ayuda a mantener la piel sana.

Los beneficios

• La fumaria ayuda a la eliminación urinaria.
• La "hierba de la ictericia" contribuye al buen funcionamiento del sistema hepatobiliar y de las funciones digestivas. Es activo en la regulación del flujo biliar (efectos colagogo y colerético), y es un aliado ideal en casos de digestión lenta o estreñimiento.
• La fumaria también es útil gracias a sus propiedades dermatológicas en casos de psoriasis, urticaria y eczema.